El cultivo de hongos proporciona una sostenibilidad óptima

El cultivo de hongos es una combinación única de reciclaje, ciencia y eficacia. Esta poderosa combinación los convierte en uno de los alimentos de origen más sostenible del mundo.

Los cultivadores de hongos en el mundo son conocidos como los "recicladores definitivos" debido a su capacidad para convertir subproductos y desechos de otros sectores de la agricultura en compost o medio utilizado para cultivar hongos. Debido a este reciclaje de otros cultivos y subproductos agrícolas, las granjas de hongos tienen una huella ecológica más pequeña que casi todas las demás empresas.

De hecho, cuando entras en la tienda y ves setas blancas o marrones, estás ante un alimento increíblemente eficiente: los productores de hoy utilizan prácticas de producción que utilizan menos de 8 l de agua para producir 500 g de setas, en comparación con una media de 100 l de agua. por 500gr de otros productos frescos. Al encontrar formas de controlar el uso del agua y reciclar el agua disponible, los cultivadores de hongos pueden minimizar la cantidad que necesitan y también minimizar el impacto de sus granjas en los entornos circundantes.

Del mismo modo, las setas son un cultivo con una huella energética relativamente baja. Se necesita 500 kilovatio hora (kwh) de electricidad para producir un hongo de 1,0 g. ¡Esta es la misma cantidad de energía (1 kWh) que se necesita para hacer funcionar una cafetera durante una hora todos los días! Debido a la forma en que se cultivan las setas, el uso inteligente de la energía es bueno para la producción y para el medio ambiente.

Crecimiento 500 gr. champiñones es tan eficiente que sólo 300 gr. genera equivalentes de CO2. Esto significa que si sumas todas las emisiones de dióxido de carbono (CO2, un gas de efecto invernadero) de producir 500 g de champiñones, desde la receta de compost hasta lo que compras en la tienda, el equivalente a solo 300 g de CO2. Para que te hagas una idea de lo pequeña que es la huella de carbono, usando 4L de combustible se emiten casi 9KG de CO2.

Los hongos se cultivan durante todo el año y no requieren mucha tierra.

De hecho, una hectárea de tierra puede producir 450.000 KG = 450 TONELADAS de setas. En otras palabras, un acre de tierra puede producir suficientes hongos para llenar casi 4.700 estadios de fútbol.

Con cada medición del aporte de agua y energía y las bajas emisiones de CO2, los champiñones son un alimento nutritivo con una huella ecológica muy pequeña. Los cultivadores de hongos no solo son los 'recicladores definitivos', sino que también proporcionan una fuente de alimento inteligente y sostenible para una población mundial en crecimiento.